Procrastinar para inspirarse: transforma tus momentos de pausa en magia creativa

La procrastinación no (siempre) es pereza. Te enseño a utilizarla para ayudar a tu creatividad y te propongo un reto colaborativo.

¿Alguna vez te has sentado a escribir, y te das cuenta de que estás haciendo cualquier cosa menos escribir?

Puede que navegues por Internet, que te levantes a poner la lavadora o visites la nevera por quinta vez. Y eso porque me hiciste caso y tienes el teléfono móvil en otra habitación, porque de lo contrario ya habrías chequeado tus redes sociales unas quinientas veces, ¿verdad?

¿Por qué es tan difícil mantener la concentración y limitarse a escribir (o estudiar o…)?

Si tu cabeza, o tu madre, te llaman perezosa, vaga, etc. NO HAGAS CASO.

La verdad es que no eres ni perezosa, ni indisciplinada, ni te falta fuerza de voluntad, talento o ambición. La cuestión de fondo es el funcionamiento de tu cerebro.

Pero…., no uses esto de excusa para perder el tiempo. Vamos a ver cómo potenciar tu creatividad y que ese tiempo no quede vacío.

No te voy a dar ahora la explicación neurológica, ya que no es mi campo y solo sé lo que leo. Voy directamente a lo práctico:

Procrastinar no es necesariamente un signo de debilidad o falta de compromiso. En realidad, es un espacio donde la mente sigue trabajando en segundo plano, buscando conexiones, explorando caminos creativos que aún no hemos identificado conscientemente.

Es en esas pausas donde a menudo encontramos las ideas más frescas y las soluciones más ingeniosas y creativas.

La próxima vez que te descubras frente al prdenador sin escribir o estés atrasando el momento de sentarte, pregúntate:

¿Qué se está cocinando en mi mente mientras tanto?

Tal vez, lo que necesitas no es forzarte a escribir, sino permitirte esa pausa como parte del proceso creativo. Porque, al final, la escritura no es solo cuestión de disciplina, sino también de dar espacio a la inspiración.

En un momento te daré unas pautas para que conviertas esos momentos en paréntesis productivos y creativos, y todos pasan por una primera idea: no te hables mal, no te fustigues y busca lo bueno. Es posible (no necesariamente) que lo que necesites sea oxigenarte si estás saturada, o ver qué es lo que te da miedo y te bloquea. En el primer caso, es una pausa necesaria, en el segundo puedes probar a trocear y empequeñecer los objetivos para que sean asequibles.

Estas son mis propuestas de hoy y que probablemente sigan con la misma estructura en las próximas Cartas:

• Tarjeta de reflexión semanal: ejercicios de escritura sobre el tema de la Carta

• Reto de conexión semanal: 15 minutos, 5 preguntas: «Explorando tu creatividad a través del tiempo». Algunas veces propondré un texto para que me enviéis y publicarlo o analizarlo.

• Club de lectura secreto: una vez al mes diré un libro que me vaya a leer y lo comentamos al acabarlo en el chat privado.

• Micro-respuestas terapéuticas: haz tu pregunta y te daré una microrespuesta - ejercicio de escritura.

• Y NOVEDAD para este último período del año:

  Invitación al nuevo juego: ¡Escribamos juntas un relato navideño!

  Este año, quiero hacer algo especial contigo y con toda nuestra comunidad. Te invito a que, juntas, escribamos un relato navideño. Cada semana, te pediré que contribuyas con ideas: personajes, escenarios, giros de la trama... Y con tu ayuda (y la mía), daré forma a esta historia que reflejará el espíritu de nuestra comunidad.

  ¿Te animas?

Si todo esto te seduce, lo haremos en grupo dentro de la comunidad de Escribe y Publica, aquí:

Y ahora, vamos a darle caña a la procrastinación con creatividad.

Tarjeta de reflexión semanal: «Procrastinar no es ser perezosa»

Enfoque en la creatividad: Esta semana, en lugar de enfocarnos en la procrastinación como un bloqueo, vamos a explorar cómo puede ser un espacio creativo. A veces, dejar una tarea para más tarde puede abrir la puerta a nuevas ideas y enfoques que no habríamos considerado en un primer momento.